IMPRONTUARIO: La máquina de gorjear

miércoles, 13 de febrero de 2008

La máquina de gorjear

Siempre he pensado que los títulos de Klee son un derroche de ingenio, auténticos poemas de un solo verso en diálogo permanente con el misterio de su pintura:


Genio sirviendo un ligero desayuno (1920)
El dios del bosque septentrional (1922)
Equilibrio vacilante (1922)
Máquina de gorjear (1922)
Ventrílocuo y pregonero en el páramo (1923)
Monumento en tierra fértil (1929)
Juramento de fantasmas (1930)
Blanco polifónico (1930)
Albergue de los cuatro (1939)
Etc.


De ahí que tenga predilección por esas obras en las que Klee se sirve de la escritura como un elemento plástico más. Por ejemplo la temprana serie (1918) a la que pertenece esta pieza, ideada tras recibir unos poemas chinos que le envió su mujer. El texto que aparece pintado en la imagen es, al parecer, del propio autor, y sus palabras iniciales dan título al cuadro: Una vez surgido del gris de la noche...




3 comentarios:

Nodisparenalpianista dijo...

Oye, pues si. Precioso cuadro. A mi Klee me cayó gordo a causa de una lectura en inglés en el cole. un día cuento, aunque no tenga mayor interés.

Juan Vico dijo...

Pues ya me lo contarás, a mí sí que me interesa. O me lo cantas, tú mismo.

Nodisparenalpianista dijo...

Vale, tomo nota. Lo postearé, que todo es bueno para el convento. Güepconvento, digo.